Envases flexibles: impulsando la economía circular y el empleo local

Los envases flexibles se convierten en una oportunidad económica y ambiental, reduciendo los desechos y creando negocios sostenibles para las comunidades. Aquí los proyectos que están liderando la transformación global.

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La economía circular ha encontrado en los envases flexibles un modelo rentable y sostenible para el reciclaje. Gracias a la infraestructura mecánica ampliamente utilizada en todo el mundo, estos envases han podido reciclarse y reutilizarse, impulsando así nuevos negocios circulares y generando ingresos para las comunidades locales.

En lugares como Ghana, India e Indonesia, se están llevando a cabo proyectos innovadores que lideran la transformación hacia un futuro más sostenible. En detalle:

En Accra, Ghana, la Fundación ASASE ha puesto en marcha el proyecto 'Closing the Loop', el cual ha logrado apoyar más de 350 puestos de trabajo en dos comunidades. Mediante la recolección separada de residuos plásticos y su posterior reciclaje, se han creado empleos y nuevas fuentes de ingresos, al tiempo que se solucionan los problemas de gestión de residuos en la ciudad.

En India, en la ciudad de Khopoli, Maharashtra, la Fundación Huhtamaki ha desarrollado un sitio como parte de la iniciativa #CloseTheLoop. Este sitio recicla alrededor de 1600 kilogramos de desechos plásticos flexibles posconsumo al día, convirtiéndolos en valiosos recursos secundarios que se utilizan en la producción de diversos productos domésticos.

India se enfrenta a un desafío considerable en cuanto a la gestión de desechos plásticos, generando cerca de 26,000 toneladas de residuos plásticos al día. Sin embargo, adoptar un enfoque más circular podría no solo cerrar la brecha en el reciclaje y la reutilización, sino también aumentar el PIB en un 5-10 %, según Mahindra & Mahindra.

En Indonesia, el Proyecto STOP trabaja en colaboración con los gobiernos regionales para implementar sistemas circulares de gestión de residuos en áreas de alta necesidad. Mediante la creación de infraestructuras, la difusión de conocimientos técnicos y campañas de cambio de comportamiento, se busca reducir el impacto negativo de los desechos mal gestionados en la salud pública, el turismo y la pesca.

El Proyecto STOP ha logrado avances significativos en Indonesia, atendiendo a una población de 278,000 habitantes y creando 318 nuevos puestos de trabajo a tiempo completo. Mediante la recolección y reciclaje de residuos, incluidos los envases flexibles, se está reduciendo la contaminación plástica y fomentando la adopción de modelos de financiación sostenibles a través de colaboraciones público-privadas.

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La adopción de la economía circular para los envases flexibles se ha convertido en una poderosa combinación en muchos países. La implementación de diseños eficientes y la posibilidad de reutilización representan oportunidades tanto económicas como ambientales, reduciendo los desechos y generando negocios sostenibles para empresas y comunidades.

Estos proyectos en Ghana, India e Indonesia demuestran que la economía circular puede ser una solución efectiva para los desafíos de gestión de residuos. Además, contribuyen a la generación de empleo local, el fortalecimiento de las economías locales y la protección del medio ambiente.

La transformación global hacia la economía circular está en marcha, y los envases flexibles juegan un papel fundamental en este proceso. Con el enfoque adecuado y la colaboración entre diferentes actores, es posible construir un futuro más sostenible donde los residuos se conviertan en recursos valiosos y se generen oportunidades para las comunidades locales.