Desmitificando el reciclaje: clave para combatir contra los desechos plásticos

En un mundo donde el 79 % de los consumidores busca productos con envases sostenibles, la claridad del reciclaje y la transparencia de las etiquetas se convierten en factores decisivos contra el desperdicio plástico.

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Según estudios, la mayoría de los consumidores están en busca de empaques más sostenibles. Sin embargo, la falta de claridad en las etiquetas y la variación en las tasas de reciclaje de plásticos en diferentes regiones del mundo crea confusión. En EE. UU., la tasa es tan baja como 4,5 %, mientras que en Europa es del 32,5 % y en el Reino Unido alcanza el 44,2 %. Pese a que la conciencia pública sobre los problemas ambientales relacionados con el plástico ha aumentado, la confusión persiste.

¿Cuál es el impacto de las etiquetas?

La falta de etiquetas claras y coherentes lleva a los consumidores a tomar decisiones incorrectas sobre el reciclaje. Investigaciones en el Reino Unido han mostrado que más de la mitad de los consumidores no entienden si el empaque puede ser reciclado. La necesidad de simplificar el reciclaje y hacerlo más accesible es evidente. La industria debe trabajar en eliminar los plásticos difíciles de reciclar y comunicar claramente cómo deben ser manejados.

De hecho, Trivium Packaging informa que el 79 % de los consumidores prefiere productos envasados de manera sostenible, mientras que el 63 % declara que es menos probable que compre productos cuyo empaque sea dañino para el medio ambiente.

No obstante, un grave error radica en la poca transparencia de la etiquetas, en tanto muchas de ellas pueden llevar a confusiones en el público acerca de qué se puede reciclar, resultando a menudo en decisiones equivocadas o la falta de acción, como recurrir a las bolsas de basura negras como opción común.

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Oportunidades y desafíos en el reciclaje

Los esquemas de devolución de depósitos (DRS) han demostrado ser altamente efectivos en Europa, con tasas de retorno superiores al 90 %. En Alemania, la tasa alcanza el 98 %. ¿Cuál será el panorama latinoamericano al respecto?

Estos esquemas incentivan a los consumidores a devolver envases vacíos, aumentando así la cantidad de material reciclable. La UE ha establecido metas para incluir material reciclado en los envases, lo que hace que estos esquemas sean aún más cruciales.

A pesar de los avances, existen desafíos como la falta de suministro de plástico reciclado y la controversia en torno a políticas como "pague por lo que tira" (PAYT). Estas políticas pueden ser efectivas pero controvertidas, ya que pueden percibirse como un nuevo impuesto. En Massachusetts, por ejemplo, los sistemas PAYT generaron un 30 % menos de desperdicio por hogar en 2020.

Así mismo, Nick Canney, el CEO de Innocent Drinks, expresó en la Cumbre de Negocios Responsables de Eventos de Reuters en junio que la compañía, una corporación B, tuvo que abandonar su plan de aumentar la cantidad de plásticos reciclados en sus botellas de un 50 % a un 100 %. La decisión se debió a la escasez de suministro y los elevados costos del PET reciclado, lo que llevó a la empresa a invertir esos recursos en otras acciones de sostenibilidad:

"El costo (del PET reciclado) es muy, muy alto y ni siquiera estoy seguro de que haya suficiente".

Entre otras iniciativas, los minoristas están aumentando la cantidad de residuos que recogen en la tienda, incluyendo plásticos previamente no reciclables. En el Reino Unido, supermercados como Waitrose y Aldi ofrecen puntos de entrega para depositar envases de plástico. Estos esfuerzos representan un cambio significativo en la obligación de las organizaciones de recoger, reutilizar, reciclar y desechar los materiales de embalaje.

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¿Qué soluciones están apostando por el reciclaje masivo?

La magnitud del problema del plástico requiere un enfoque integral que aborde a los consumidores en todos los niveles. Desde reemplazar el plástico con opciones más sostenibles hasta proporcionar información clara sobre cómo reciclar, reutilizar o devolver los materiales al final de su vida útil.

La UE y el Reino Unido están trabajando en regulaciones para impulsar las tasas de reciclaje y garantizar una comunicación clara; por su lado, la Unión Europea tiene planes para incrementar sus tasas de reciclaje de plástico, implementando las reglas de Responsabilidad Extendida del Productor (EPR). Estas normativas exigen que, para 2026, todos los envases indiquen si son reciclables o no. La meta del bloque es alcanzar un 65 % de reciclaje de desechos para 2025, con una aspiración de llegar al 70 % en 2030.

Por otro lado, el Reino Unido ha establecido su propia meta de reciclaje del 65 % para 2035, de acuerdo con sus regulaciones EPR.

La batalla contra el desperdicio plástico es compleja y multifacética. La claridad en el reciclaje, junto con iniciativas innovadoras y una colaboración efectiva entre la industria, los gobiernos y los consumidores, puede marcar una diferencia significativa en la construcción de un futuro más sostenible. La combinación de políticas gubernamentales, responsabilidad de la industria y conciencia del consumidor es clave para avanzar hacia una economía circular y sostenible.