Crisis en el reciclaje: cierre de una de las organizaciones de reciclaje más tradicionales

El cierre de organizaciones de reciclaje y la merma del 40 % en ingresos de los recicladores desencadenan una crisis en el sector en Antioquia, afectando a familias y al medio ambiente.

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La reciente clausura de una de las organizaciones de reciclaje más antiguas en Sonsón, Antioquia, ha encendido las alarmas en el sector. Con una disminución del 40 % en los ingresos de los recicladores, la Corporación Corpomays cierra tras 30 años de servicio debido a su situación económica inviable. Este hecho no es aislado, ya que el sector del reciclaje en Antioquia atraviesa una crisis preocupante, afectando a más de 5.500 recicladores en Medellín y a 33 organizaciones dedicadas al aprovechamiento de residuos.

El impacto económico se extiende a más de 40 familias en Sonsón y al medio ambiente, ya que la cantidad de material reciclable que solían recolectar ahora se prevé que termine en rellenos sanitarios, calles o quebradas.

Los recicladores, esenciales para alcanzar metas ambientales en el país, han visto cómo el precio de los metales reciclables ha disminuido, lo que resulta en una reducción del 40 % en sus ingresos, a pesar del aumento en el tiempo y esfuerzo dedicado a la labor de reciclaje. Esta situación pone en peligro su calidad de vida y oportunidades de progreso.

La incertidumbre en las reglas de juego, los cambios en los parámetros de recolección de residuos y la falta de apoyo gubernamental han exacerbado la situación, poniendo en riesgo la sostenibilidad del sector. Si no se implementan soluciones pronto, se prevé un efecto en cadena que afectará a las ciudades, inundándolas de basura y comprometiendo la meta de recuperar residuos aprovechables.

La Fundación Aburrá Verde E.S.P., fundada en plena pandemia en Envigado, se ha convertido en un faro de esperanza para los recicladores en Antioquia. Su misión es proporcionar condiciones dignas a los recicladores agremiados, trascendiendo la simple relación comercial de compra y venta.

Iniciaron con 17 recicladores en Envigado y hoy operan en varias localidades, incluyendo Envigado, Itagüí, La Estrella, Sabaneta y Medellín, donde han logrado agremiar a más de 200 recicladores. Fundave actualmente capta 930 toneladas de material aprovechable cada mes y opera con tres estaciones de clasificación y aprovechamiento.

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Sin embargo, mantener este crecimiento ha sido un desafío, especialmente debido a la difícil situación económica que atraviesa el país y la variabilidad del dólar, que ha impactado negativamente en el precio de los metales reciclables.

A pesar de que la cantidad de material recuperado por los recicladores se mantiene constante, sus ingresos han disminuido en un 40 %. Las reservas que solían destinar a la educación de sus hijos, mejoras en sus viviendas o situaciones de emergencia se han agotado. El incentivo de aprovechamiento, que reciben a través del cobro de tarifas a prestadores como Emvarias, Interaseo y Enviaseo, es lo único que les ha permitido sobrellevar la situación y pensar en un futuro medianamente estable.

La preocupante disminución de ingresos tiene graves consecuencias para las familias recicladoras y para el medio ambiente. Si la situación no mejora, se prevé un efecto en cadena en las ciudades, con recicladores buscando alternativas de empleo y miles de toneladas de material aprovechable que terminarán en vertederos. La ciudad de Medellín apenas recupera el 12 % de los residuos aprovechables, y Antioquia no alcanza ni el 15 %, lo que pone en riesgo la gestión adecuada de los residuos y la sostenibilidad ambiental.