Estado de California desarrolla propuestas innovadoras en manejo de residuos plásticos

Mediante iniciativas como el Sistema Integrado de Gestión de Residuos y la Ley de Reciclaje y reducción de desechos de Envases de Bebidas, el estado de California ha trabajado por construir una sociedad que consume menos y recicla más. En Estados Unidos, es el estado líder en reciclaje, con una tasa de 59 por ciento de reaprovechamiento de todos los materiales. En los últimos 20 años, el ‘estado dorado’ ha generado más de 85.000 empleos a través de mercados de reciclaje en expansión.

California ha logrado posicionarse como un referente ambiental, en parte, gracias a CalRecycle, la principal autoridad del estado en el manejo integral de los residuos sólidos municipales. Conocida oficialmente como el Departamento de Recursos, Reciclaje y Recuperación, esta entidad juega un papel importante en la administración de los vastos recursos de California, a la vez que promueve la innovación tecnológica para fomentar la sostenibilidad económica y ambiental. Edgar Rojas, Especialista en el Manejo Integral de Residuos Sólidos Municipales de CalRecycle, nos comentó algunas de las principales iniciativas que se están generando actualmente en el estado de California con respecto a los residuos plásticos.    

De acuerdo con Edgar, una de las principales actividades de CalRecycle es la investigación tanto exploratoria, para identificar nuevos problemas, como  constructiva, para desarrollar soluciones a los problemas registrados. Algunos ejemplos de las actividades de investigación más notorias, y que constituyen el punto de partida para otras iniciativas y proyectos, son los estudios de caracterización de residuos sólidos comerciales y residenciales, donde se miden e identifican diversos materiales, entre ellos los plásticos. Hasta el momento, CalRecycle ha elaborado tres estudios de este tipo en 1999, 2003 y 2008, y tiene previsto realizar el próximo en 2014. De acuerdo con el último  estudio, California genera 3,8 millones de toneladas anuales de desperdicios plásticos o 9,6 por ciento en peso del total de los residuos sólidos municipales. Los envases de plástico sólo representan un 1,5 por ciento en peso del total de los residuos sólidos municipales de California.

“Hemos hecho diversos estudios de mercado para identificar las cantidades de plástico disponibles para reciclar y los productos de plástico reciclado que tienen mayor demanda, así como proponer incentivos para aumentar su utilización y disminuir los gastos de procesamiento. Aquí en California es caro reciclar el plástico debido a los costos elevados de energía y mano de obra”, aseguró el especialista. “También desarrollamos pruebas protocolarias de control de calidad para las resinas de plástico reciclado, con miras a proponer un modelo de confianza en la calidad de los productos fabricados con plástico reciclado”, agregó.

Iniciativas en gestación

CalRecycle trabaja activamente en desarrollar soluciones para el manejo de materiales plásticos, mediante iniciativas que se clasifican en dos categorías: de sostenibilidad y de obligatoriedad.

Las iniciativas de sostenibilidad son de carácter voluntario. Actualmente, uno de sus proyectos bandera, que estará terminado a finales de 2011, es el programa PCP2 (Plastic Container Pollution Prevention). “Investigamos la factibilidad de desarrollar un proceso de manufactura circular cerrado, de botella a botella, usando bacterias para producir PHA. Esto, a partir del metano generado en los rellenos sanitarios y de las botellas recuperadas de el mismo material”, comentó Edgar Rojas.

De acuerdo con el especialista, el estudio analiza el ciclo de vida de toda la transformación del envase de PHA: Fabricación de la botella, regreso de la botella al botadero de basura para convertirse en metano, transformación del metano en PHA por acción de las bacterias, incorporación del material reciclado y fabricación de nuevas botellas a partir del PHA regenerado.

“Estamos haciendo análisis de mercado, de costos de producción y evaluando la factibilidad de introducir el envase a escala comercial. Así mismo, estamos trabajando en la identificación y cuantificación de posibles sustancias tóxicas desprendidas del envase durante su uso y disposición final”. Como el estudio es multidisciplinario, CalRecycle está haciendo uso en su proyecto de la capacidad investigativa de universidades como Stanford, Berkeley, Davis, Chico y Santa Bárbara.

Otro ejemplo interesante de una iniciativa sostenible es el del reciclaje de películas de plástico, que ha causado preocupación en California por la generación de grandes cantidades de residuos de fuentes comerciales, residenciales y de agricultura. Específicamente sobresale la iniciativa Hospital Blue Wrap, que busca recuperar la película azul de PP, esterilizada, que se usa para envolver el material quirúrgico utilizado en las salas de cirugía. También se destaca el programa de reciclaje de los plásticos usados en la agricultura. De acuerdo con un estudio realizado por CalRecycle en mayo del 2008, la industria agrícola de California generó aproximadamente 56.000 toneladas de desperdicios plásticos en forma de película, los cuales son de difícil recuperación debido a la falta de una tecnología efectiva para remover los contaminantes (suelo, cintas adhesivas, plantas, etc.).  Por tal motivo, es imprescindible para CalRecycle invertir en investigación tendiente a mejorar la tecnología de recolección, lavado y procesamiento de las películas de plástico utilizadas para cubrir las plantaciones.

 “Estamos buscando soluciones para manejar este material, creando un grupo de trabajo con gobiernos locales, compañías fabricantes y organismos e individuos involucrados para desarrollar planes específicos que contribuyan a recuperar productos reciclables que, como este, terminan en los botaderos”, aseguró Rojas.

Leyes establecidas

Entre las iniciativas de carácter obligatorio, instauradas por medio de leyes, está la creación de un banco de información para el reciclaje de plástico. En este banco, CalRecycle recolecta todo tipo de información relacionada con los plásticos y su apropiado manejo ambiental. El objetivo es suministrar la información necesaria, especialmente a quienes no encuentran cómo reciclar su material.

De carácter obligatorio también está la ley que les exige a fabricantes de bolsas para la basura incorporar en el producto final 10% de material reciclado posconsumo. CalRecycle se encarga de monitorear las disposiciones contenidas en la ley de California y certificar a las compañías fabricantes de dichos productos.

Otra ley de contenido mínimo de resina reciclada posconsumo, regula a las compañías que producen productos envasados en recipientes de plástico rígido, o RPPC (Rigid Plastic Packaging Container) como se les conoce, que son vendidos en California. CalRecycle hace efectiva la ley mediante la certificación a las compañías normalizadas. La ley se aplica a fabricantes, productores y generadores de productos vendidos u ofrecidos para la venta en RPPCs regulados.  Existen cuatro opciones para cumplir con los requerimientos de la ley:

1. Que los recipientes plásticos contengan 25% de resina posconsumo.
2. Que su peso haya sido reducido en un 10%.
3. Que los recipientes puedan ser reutilizados hasta cinco veces.
4. Que tenga una rata de reciclaje del 45% si es una marca registrada o un tipo particular de RPPC.

Una de las más recientes iniciativas es la del reciclaje en la tienda (Store Recycling Program). Los operadores de supermercados cuyas ventas sean superiores a dos millones de dólares anuales, y los establecimientos al detal que tengan más de 10 mil pies cuadrados y con una licencia para operar una farmacia dentro del establecimiento, deben asignar un lugar en la tienda para  que los clientes depositen las bolsas de plástico usadas.

Lecciones para América Latina

Edgar Rojas es enfático en la importancia de ver los residuos de plástico como un artículo de valor, un commodity, cuya recuperación contribuye a la generación de empleo, a la reducción del uso de materiales vírgenes, al ahorro de consumo energético y a la disminución de emisión de gases con efecto invernadero.

Según el especialista, en América Latina los bajos precios de mano de obra, energía y transporte podrían hacer del reciclaje de plástico una industria económicamente viable, que integre los diferentes sistemas de reciclaje: químico, mecánico y energético. El reto está en lograr un suministro consistente de materia prima recuperada con buena calidad, y en lograr el fortalecimiento de la estructura de recuperación y reciclaje mediante programas para aumentar la demanda del uso de resinas recicladas, la introducción de iniciativas legislativas como la responsabilidad extendida del productor e incentivos económicos.

Así mismo, insta a los transformadores latinoamericanos de plástico a estar atentos a las tendencias globales en sostenibilidad, pues será este el factor que determinará la viabilidad comercial para exportar productos a mercados con altas exigencias en este tema y con una marcada preferencia hacia la compra de productos verdes.